Prórrogas
Al principio quería dejar estas páginas después de mi vuelta en París. Creadas para enseñar un poco de mi vida barcelonesa a mis amigos franceses y a mi familia, no tenia sentido seguir escribir desde Francia. Ahora he cambiado de idea y voy a compartir fragmentos de mi diario parisino. Pero en castellano. Tengo varias razones para hacerlo.
La primera es parecida a la que me había convencido para empezar este blog. Ahora puedo alardearme de tener unos amigos en Barcelona, y en otros sitios, con quien me gustaría mantener el contacto. La segunda es que tengo todavía muchas cosas que contar sobre mi estancia y que de una cierta manera me permite permanecer mantener el vínculo con Barcelona. Por fin, es importante continuar de escribir escribiendo en español a fin de mantener un nivel aceptable. Por cierto, estáis invitados a corregirme cuando hago unos errores.
Desde el sábado por la noche he recobrado la sonrisa. Volver a ver Sharareh me permitió salir de la mini crisis de depresión que me había invadido. Todavía estoy un poco fuera del mundo, y intento huir de las malas ondas. A pesar de eso, algunos malos espíritus tientan de romper mis sueños y mis ilusiones con cosas de un pragmatismo patético. ¡Pero no pasaran! Os lo aseguro.